Ceuta, centro de operaciones del iGaming. Ceuta y Melilla se postulan como el epicentro del iGaming en Europa. Desde el 2018, 26 empresas del sector del juego en línea se han establecido en esta Comunidad Autónoma. El plan de ventajas fiscales que el Gobierno de Ceuta aprobó para atraer empresas del iGaming está obteniendo buenos resultados.
Ceuta y Melilla, importantes ventajas fiscales para empresas
En 2018, el Gobierno ceutí aprobó un plan de ventajas fiscales para atraer la localización de empresas relacionadas con el juego online con el objetivo de impulsar la economía. La bonificación del 50% en la Seguridad Social, la rebaja del 60% en el impuesto de la renta y una tributación inferior en el impuesto de sociedades son los principales reclamos para atraer empresas digitales.
Ceuta prevé situarse en los próximos años como epicentro de operaciones del iGaming en Europa. Ceuta podría convertirse en la gallina de los huevos de oro y quitarle el puesto a Malta y Gibraltar. Dos enclaves hasta ahora fundamentales del iGaming. Uno de los efectos negativos que ha tenido el Brexit es la huida de empresas del peñón. Malta también ha visto como algunas empresas abandonaban la isla debido a las leyes cada vez más estrictas y las restricciones de juego de los diferentes países. Así algunos operadores de juego han visto en Ceuta y Melilla una tabla de salvación.
26 empresas iGaming
El Gobierno ceutí ha trabajado por situar a la comunidad en el mapa del iGaming en Europa. En los dos últimos años, 26 empresas se han instalado en la ciudad. De las 26 empresas, 10 empresas de origen español y el resto,16 proceden del extranjero. Se calcula que las empresas de juego online han dado trabajo alrededor de 260 empleados y está previsto que crezca en los próximos meses.
Ceuta, centro de operaciones del iGaming. En 2018, Sportium, Betfred, 888 Casino, Suertia, Circus, Paston, Luckia, Casino 777 o Casino Barcelona apostaron por trasladar sus oficinas a la Ceuta y Melilla. Entre los últimos operadores en aterrizar están Bwin o Bet365. Se prevé que a lo largo del año, otras empresas trasladen sus oficinas principales a dichas ciudades.
Entre los requisitos para poder beneficiarse de los incentivos fiscales está que al menos la mitad de la plantilla trabaje físicamente desde alguna de las ciudades y que Ceuta o Melilla sea su residencia habitual de los trabajadores. Además de que el 50% de la masa salarial corresponda a los empleados con residencia en la Comunidad.
Porque estos paraisos fiscales atraen a grandes empresas y no pueden situarse en la península con las mismas condiciones? Nunca lo entendere